Con emoción anuncio que continúa esta nueva etapa del sello editorial de nuestra Universidad. Ahora toma la posta nuestro Fede, con un texto que va a dejar una huella profunda. En Politeia están sus ideas, esas que tanto provocaban al status quo, y también asoma su voz. El que se acerque a Politeia volverá a oír la voz valiente de Federico Delgado, yo no pude evitar rememorar las señeras charlas que teníamos, y que hoy extraño.
Fiscal Titular ante los Juzgados Nacionales en lo Criminal y Correccional Federal de la Capital Federal, Director de nuestro Observatorio Social y Republicano y alma mater de nuestros Simulacros de Juicios Penales por Jurados.
Hombre sabio, intrépido, honesto, solidario, de firmes convicciones y con coraje para enfrentarse al poder de turno. Generoso con todo aquel que se acercaba y mostraba interés por cimentar una sociedad más justa, hacedor de proyectos y ejecutor de metas. Siempre compartiendo sus ideas para que trasciendan y empoderen a nuevas generaciones.
En Politeia, con su audaz e incisiva pluma, plasma reflexiones teóricas, filosóficas y jurídicas sobre nuestro sistema republicano y su comprometida vida profesional. Recorre distintos momentos históricos y pone en carne viva los desafíos que, como sociedad, debemos asumir para retomar la senda del desarrollo con dignidad, libertad republicana y por sobre todo igualdad.
Sus reflexiones no son utópicas, trascienden el hoy, abrevan en la razón de ser de la democracia, para erigirla en la mejor forma de gobierno para tutelar derechos individuales y colectivos.
Juan, su hijo, al prologar la obra nos adelanta la firme convicción y certeza de su padre de que “solo con una revalorización de la política como instancia colectiva de mediación y construcción de un interés común es posible recuperar el inherente poder sobre nuestras propias vidas que décadas de empobrecimiento y desigualdad nos han arrebatado” (p. 10).
En esta obra póstuma Fede nos presenta su mirada sobre la democracia actual y nos exhorta a cumplir nuestra responsabilidad cívica de salvaguardar los principios fundamentales y el bienestar de nuestra nación.
Nos invita a desenmarañar los lazos entre la Política, el Poder Judicial y la sociedad en Argentina. Aborda de manera categórica y directa los conflictos que causan la autodestrucción de la sociedad argentina, propone cambios orgánicos y miradas innovadoras. “Solo la profundización de los rasgos del republicanismo contiene la posibilidad de recuperar desde la praxis concreta el poder ciudadano. Ese poder debería hacer factible la reapropiación de las instancias institucionales y el gobierno de las mayorías a través de las leyes” (p. 145).
Es un libro que nos permite avizorar un cambio del que podemos ser protagonistas y no meros observadores o votantes.
Fede nos reta y nos orienta: “El desafío es hacer real la república democrática, ensanchar las bases para recuperar la institucionalidad y colocarla al servicio de un proyecto de nación inclusivo, el que las mayorías puedan participar del ejercicio de la soberanía realmente. La mejor guía para recorrer ese camino es bastante obvia. Brevemente se trata de “afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino”. El obstáculo inicial, es verdad, tiene que ver con las desigualdades materiales. No obstante, la única posibilidad de removerlo yace en la recuperación del entramado institucional para todos los ciudadanos, para crear sujetos de derecho y dejar atrás una situación en la que muchos ciudadanos son objetos de derecho” (p. 94).
Con su pase a la eternidad nos deja un precioso legado, es compromiso de todos los que tuvimos la dicha de compartir sus ideales sostener sus proyectos y mantener encendida su vocación por la justicia. Aquí mi compromiso.
Dra. Paula Costanza Sardegna
Decana Facultad de Ciencias Jurídicas
Universidad Argentina John F. Kennedy
